Sacar un nuevo producto en Saigu es como un embarazo y un parto, con una diferencia: tenemos que tomar cientos de decisiones sobre el qué y el cómo, mientras que en la naturaleza tu cuerpo y el universo se encargan de automatizar todos esos procesos.
Lola, Candela, Luna… colores intensos, vibrantes, atrevidos… Para ti puede que sean solamente eso, unos pintalabios nuevos, con colores diferentes a los anteriores. Pero son mucho más que eso. Son el resultado de horas y horas de cuestionamientos internos, de reflexiones existenciales, de ‘quiénes somos’ y de ‘qué queremos aportar a este mundo’. Y, si te parece exagerado que en Saigu nos comamos tanto la cabeza por unos labiales, quédate y lo entenderás.
Te hemos explicado en otras ocasiones que ‘natural’, ‘sostenible’ o ‘vegano’ son conceptos que, aunque a algunas personas les suene a lo mismo, son extremadamente diferentes y muchas veces incluso opuestos o incompatibles los unos con los otros.
Básicamente ‘natural’ significa que contiene ingredientes procedentes de la naturaleza pero pueden ser muy poco sostenibles (como los aceites esenciales) y también implica que se puede haber dañado o explotado a animales para obtenerlos. ‘Vegano’ significa que durante todo su proceso de fabricación no se utiliza ningún ingrediente de origen animal, pero la formulación puede ser totalmente sintética como lo es un trozo de plástico. Y ‘sostenible’ significa que lo que se prioriza en sus procesos es el medio ambiente.
Cambio de prioridades
Por eso, como marca, debes tener muy claros tus valores y cuál es tu orden de prioridades. Y podemos decir que esto es lo que ha cambiado en Saigu entre las primeras líneas de labiales que sacamos y estos nuevos que lanzamos en 2022. Cuando empezamos, queríamos que nuestros productos tuvieran el máximo porcentaje de ingredientes naturales. Lo que sucede es que, a la hora de formular un pintalabios, esta decisión te limita mucho especialmente en cuanto a tonos, porque significa que solo podrás obtener colores que estén presentes en la naturaleza. Y estos generalmente son tonos tierra y tonos apagados, pero los icónicos rojos, corales o fuxias, esos se obtienen solo con pigmentos orgánicos sintéticos.
¿Sabes cómo se consigue el rojo carmín?
Históricamente lo que en la industria de la cosmética se ha utilizado para conseguir el color rojo es el carmín, un colorante que se obtiene de un insecto llamado cochinilla. Y esto, que se lleva haciendo desde tiempos inmemoriales, que es ‘lo normal’, pues en Saigu ya no nos parecía tan normal y hemos dicho basta. Porque, por mucho que nos digan que se trata de un ‘insecto plaga’ que ataca y mata a las plantas en la naturaleza… creemos que no está justificado explotar a un ser vivo para conseguir un producto de cosmética.
Además, este colorante da un tono de rojo bastante apagado o ‘sucio’, con él no podemos conseguir el icónico “true red” que todo el mundo quiere tener en su neceser.
¿Qué es para ti ‘natural’?
Así que, con todo esto, en Saigu dijimos basta al uso de este ingrediente. Pero claro, nuestro slogan no deja de ser ‘cosmética natural para pieles exigentes’, y seguimos comprometidos con los ingredientes procedentes de la naturaleza pero no a cualquier precio, ¿qué significa para ti ‘natural’? o, más bien, ¿a partir de qué porcentaje consideras que un producto es natural?
Para nosotros en Saigu, hasta ahora significaba que tenía que estar cerca del 100%. De hecho, no había ningún producto que tuviera menos de un 99%. Pero somos conscientes de que en la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética, conocida como Stanpa, no tiene ningún requerimiento específico a la hora de etiquetar un producto como natural más allá de especificar el porcentaje de ingredientes naturales y hay marcas que tienen productos bien por debajo del 75% y que igualmente los anuncian como naturales sin ningún problema.
Calidad y coherencia
Por lo que llegó el momento de sentarnos delante de nuestros valores y revisar la importancia que le dábamos a cada uno de ellos. Así nos dimos cuenta que para nosotros era más importante la calidad, es decir, que puedas tener un labial en los tonos que te gustan, que todo el proceso sea vegano y, por supuesto, poniendo la sostenibilidad por delante.
Nos pusimos a formular y conseguimos esta gama de seis preciosos colores todos ellos tonos icónicos y favorecedores. Es una textura única, ultrasensorial. Se deslizan por tus labios como la seda aportando un color intenso de una sola pasada. Contienen ácido hialurónico para mantener tus labios lisos e hidratados y siguen teniendo entre un 80% y un 98,75% de ingredientes naturales según los tonos.
Aunque no ha sido un proceso fácil para nosotros, sí que consideramos que era un paso imprescindible para ser más coherentes con nuestros valores y estamos muy contentos con los nuevos labiales. Pero nos encantaría saber qué piensas tú, qué te parece el razonamiento que nos ha traído hasta aquí y qué hubieras hecho en nuestro lugar. Gracias, como siempre, por estar ahí y por hacer Saigu.
13 comentarios
Siempre y cuando los sintéticos que uséis sean seguros (supongo que sí, os considero lo bastante inteligentes y coherentes ☺️) me parece genial. Al final es complicado hacer malabares para equilibrar la balanza y crear un producto ético y bonito, y me encanta que os comáis el coco para hacerlo realidad. Si es que los antiguos pintslabios tuvieron mucho éxito aún siendo “apagados”, tal vez podrían volver en pequeñas cantidades para las personas que quieren acercarse más al 100% natural (esto lo sugiero desde el desconocimiento de cuan práctico o viable es esto), yo Pregonda lo encuentro precioso, aunque lo compré pensando que era vegano y ahora me asalta la duda de si llevaba cochinilla 😰 (no he entendido si vuestros pintalabios no la han contenido nunca o sí los antiguos sí y los nuevos no). Ampliando lo dicho: me encanta que además seáis tan honestxs y transparentes, y los nuevos tonos son vibrantes y preciosos ❤️
Me parece súper interesante toda esta reflexión que hay detrás y sobre todo que la compartáis.
En mi cuadrilla ya hemos dicho que la siguiente que pida, todas cogeremos alguno (y que no paren los sérums, tampoco!)
Un abrazo equipo!
La verdad que no soy mucho de maquillaje peroooooo los labiales me encantaaaaaaan y llevaba un tiempo intentando pasarme a labiales veganos pero es complicado por el tema de los colores como lo dicen ustedes. Me ha encantado que le dedicaran un espacio a contar la historia de estos nuevos labiales, eso realmente demuestra el compromiso que tienen para con la sociedad. Gracias.
Por otra parte solo como recomendación a la hora de comprar y elegir el color no aparece el nombre, estaría chévere que apareciera al momento de seleccionar el círculo con el color.
Que más da que un producto lleve parte de química si no daña el medio ambiente , no daña a los animales y además de tener una gran calidad en lo estético para los humanos , es hasta beneficioso en cuestión de hidratacion.
Basta de quimiofobia .
La naturaleza da frutos maravillosos y venenosos también, al igual que la química puede ser insalubre o milagrosa y curar una enfermedad letal.
Equilibrio , equidad y coherencia.
La quimiofobia lleva a la gente a formular cosmética sin tener ni idea y fabricarse cosas como su propio protector solar , POR FAVOR.
Si esta bien formulado , respeta al medio ambiente , a los animales y es bueno para los humanos , además de estéticamente bonito , no se me ocurren más cosas que pedirle a un labial .
Buah, pues mil gracias por contarlo así, tan transparentes como siempre. Deseando tener el labial en casa ya!
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