Tal vez sí sea verdad eso de que las peores situaciones sacan lo mejor del ser humano o que la bondad es contagiosa. A nosotros, sin duda, después del shock por las muertes y la devastación que dejó la dana a su paso por Valencia y Castilla la Mancha, nos movió profundamente la solidaridad de los miles de voluntarios que fueron a limpiar. Tanto que nos ha inspirado a crear el Fondo Solidario Saigu, un espacio a través del que pretendemos destinar parte de nuestros ingresos a ayudar a los afectados por esta tragedia a largo plazo pero también a otras causas e iniciativas en las que Saigu pueda aportar su granito de arena.

Se podría decir que todo se ha alineado para que pudiera nacer esta nueva rama de Saigu. Como te contábamos hace unos días en newsletter y redes, la mitad del equipo de Saigu se encuentra en Valencia y hemos vivido muy de cerca la catastrófica dana que tantas vidas se ha llevado por delante, tanto en sentido literal, como en sentido figurado para los que han perdido sus hogares y negocios. Igual que tantas personas, instituciones y marcas, sentimos la necesidad de ayudar y no sabíamos cuál podía ser la mejor manera para que no fuera algo puntual, para que no nos olvidáramos del tema cuando saltara la siguiente noticia.

Como desde el maquillaje y la cosmética es difícil donar directamente nuestros productos, se nos ocurrió esto del Fondo Solidario Saigu como una forma de canalizar parte de los ingresos de diferentes campañas para ayudar a quien lo necesite. Por supuesto que estaremos ahí para apoyar a profesionales del maquillaje que hayan perdido su material de trabajo, también a empresas locales y proveedores afectados y, más allá de eso, cualquier asociación, iniciativa o causa a la que podamos aportar. De pronto todo esto resonó tan bien con los valores de Saigu y lo que los miembros del equipo sentíamos en ese momento que solo nos quedó preguntarnos ‘cómo no hemos hecho esto antes’.

Por qué aquí y ahora

Pero precisamente han confluido muchas cuestiones por las que ahora es el momento idóneo para empezar. Por un lado, dentro de lo que se conoce como PYME, estamos transitando de la pequeña hacia la mediana empresa y nos vamos encontrando en una posición un poco más cómoda. Por otra parte, nuestros valores han ido evolucionando y madurando desde 2019 y, partiendo de la sostenibilidad y el medioambientalismo, hemos llegado a una forma de estar en el mundo que busca dejarlo un poco mejor de lo que se lo encontró también en el ámbito socioeconómico y de la salud mental.

Así que, ver en la Ciudad de las Artes y las Ciencias esa riada de personas que se habían levantado a las 6 de la mañana para ayudar a desconocidos a limpiar el lodo que había anegado sus casas fue la chispa que prendió la mecha de la solidaridad en Saigu que ya estaba lista para arder.

Y entonces tuvimos que bajarlo a tierra, hacer números, consultar leyes y encontrar una manera sostenible económicamente para este punto del proyecto. Decidimos que crearíamos un fondo, como una hucha, en la que guardaríamos un porcentaje de nuestros ingresos en cada campaña de descuentos y lanzamiento de nuevos productos que tuviéramos en Saigu a partir de ya mismo. En las campañas grandes, como la Saigu Week (anteriormente Green Week, nuestro equivalente al Black Friday) o en los descuentos de verano, destinaremos un porcentaje mayor de nuestros ingresos, mientras que en eventos más pequeños, como Navidad, nuestro aniversario o lanzamientos exclusivos, también haremos aportaciones. De este modo, aspiramos a alcanzar un objetivo mínimo anual de 20.000€ destinados a causas solidarias.

Así, poco a poco y a medida que vayamos llenando esta hucha solidaria, iremos buscando diferentes iniciativas con las que colaborar empezando, por supuesto, por los afectados por la dana y acercándonos a todas aquellas causas a las que les podamos aportar nuestra humilde ayuda. A medida que esto suceda, iremos compartiendo contigo tanto lo recaudado como lo que se haya donado con la misma transparencia que venimos haciendo las cosas desde el principio.

Este es un viaje que emprendemos ahora y no sabemos realmente hacia dónde nos llevará ni en qué se convertirá con el tiempo. Pero damos los primeros pasos con mucha ilusión y muy orgullosos de que la sostenibilidad y la solidaridad sean los cimientos de Saigu.